Declaración conjunta de los Oficiales de Salud del Área de la Bahía

Mientras las enfermeras, médicos y otros trabajadores de la salud del Área de la Bahía que atienden a pacientes con COVID-19 reciben los primeros lotes pequeños de una vacuna rigurosamente evaluada, los Oficiales de Salud de la región ven una esperanza: ahora tenemos una herramienta crucial para ayudar a combatir esta pandemia.

Estas vacunas en entornos hospitalarios de cuidados agudos siguen un marco federal y estatal adoptado localmente, que también protegerá pronto a quienes viven en centros de atención especializada, en cuyos entornos los miembros vulnerables y de la tercera edad de nuestras comunidades tienen más probabilidades de agravarse y de morir de COVID-19.

A medida que aumentan los suministros de vacunas para eventualmente incluir a otros grupos, los Oficiales de Salud del Área de la Bahía y los funcionarios federales piensan que estas vacunas seguras y eficaces funcionarán en conjunto con los hábitos diarios y con el trabajo esencial de salud pública que finalmente acabará con la pandemia.

Los pasos clave para combatir la pandemia incluyen el trabajo de salud pública para proteger a los grupos de alto riesgo y a los trabajadores de la salud, detectando y aislando casos, y también rastreando y poniendo en cuarentena a los contactos. Para el público, esto significa cubrirse el rostro, evitar las reuniones, posponer los viajes y quedarse en casa siempre que sea posible.

"La llegada de la vacuna es un signo de esperanza que nos brinda otra herramienta fundamental en la lucha contra esta pandemia", dijo la Dra. Sundari Mase, Oficial de Salud del Condado de Sonoma. "Nuestros colaboradores en el sistema de atención médica pueden ahora empezar a vacunar a los trabajadores de primera línea y a los habitantes más vulnerables para que no contraigan COVID".

Los 12 oficiales de salud de los Condados de Alameda, Contra Costa, Marin, Monterey, Napa, San Benito, San Francisco, San Mateo, Santa Clara, Santa Cruz, Sonoma y la Ciudad de Berkeley apoyan las pautas de distribución estatales de la vacuna, que ahora dan prioridad a los trabajadores sanitarios en centros de cuidados intensivos. Cada jurisdicción utilizará esa guía para implementar la distribución de vacunas en esta primera fase, que puede que lleve varios meses, a medida que se aumentan los suministros. Es posible que las vacunas para el público en general estén disponibles a principios del verano.

Todos los oficiales de salud de la región tienen pensado darse la vacuna cuando se presente la oportunidad.

Estas primeras dosis de la vacuna de COVID-19 llegan en medio de un aumento sin precedentes de los casos a nivel regional y estatal. A medida que las unidades de cuidados intensivos de los hospitales se acercan al límite de su capacidad, las órdenes de permanencia en el domicilio están ya vigentes o se anticipa pronto su implementación en toda la región.

Quedarse en casa salva vidas.

“En esta hora aciaga, la vacuna nos da un foco que ilumnina la dirección hacia la que nos dirigimos”, dijo la Dra. Lisa B. Hernández, Oficial de Salud de la Ciudad de Berkeley. “Las acciones y los hábitos diarios que adoptamos aumentan la luz en ese camino y mejoran la protección para todos”.

“Este primer lote de vacunas protegerá a aquellos que corran un riesgo crítico de infección y da aliento a nuestro futuro”, dijo la Dra. Karen Relucio, Oficial de Salud del Condado de Napa. “Mientras esperamos el incremento de la provisión de vacunas, es peligroso bajar la guardia demasiado pronto. Tomar decisiones inteligentes y tener hábitos diarios sanos durante la pandemia son fundamentales para proteger al resto de nosotros ".

Para saber más sobre las pautas estatales para la primera fase: Pautas para la Fase 1A de la distribución de la vacuna contra COVID del Departamento de Salud Pública del Estado de California